miércoles, 5 de enero de 2011

A cuanto tiene los güevos?


Era la tercera vez que entraba, y volvió a preguntar la misma cosa: Don Gilberto, a cuanto tiene los güevos. A dos dedos del culo!!!!!  Le respondió el pulpero. Yo estaba afuera fumándome un cigarro y solté la carcajada con aquella salida tan llena de desesperación…era la tercera vez que doña Ana preguntaba, esta vez salió corriendo asustada rumbo a su casa.
Minutos despues su hijo entró en la pulpería de don Gilberto, y yo pensé: esto se puso bueno…pero él solo quería saber  si su mamá había ido a preguntar por algo. Güevos!!! Dijo don Gilberto. El muchacho le contó que a ella le gustaban los huevos revueltos al desayuno, que acababa de desayunar y otra vez le había pedido desayuno por lo que el optó por decirle que no habían huevos, entonces ella salió hacia la pulpería a buscarlos, eso se repitió tres veces, pues doña Ana recientemente fue diagnosticada con Alzheimer.
Ufff!!! Que silencio sepulcral  luego de que el muchacho salió de allí. Don Gilberto miró el cartón de huevos que había en el mostrador y con un gruñido para ocultar el llanto lo estrelló contra el piso, un perro callejero se puso a lamer los huevos de piso y don Gilberto se lanzó contra él y lo sacó a patadas de la pulpería.
Lo pateó tan fuerte que el perro murió en unas horas, luego murió doña Ana unos años despues y la pulpería de don Gilberto tampoco existe, porque el murió tambien.
Y aquél día yo escuché su respuesta y reí a carcajadas…que mierda!!!!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario